1.- Carencia de descentralización en la toma de decisiones.
En la actualidad, muchos gobiernos locales y grupos vecinales organizados de forma oficiosa carecen de poder político, capacidad de decisión y recursos financieros para llevar a cabo acciones constructuvas que satisfagan las necesidades de las ciudades en proceso de rápido crecimiento. Los ciudadanos locales y los funcionarios se sienten a menudo frustrados por los gobiernos centrales, que les mantienen desiformados, subestiman su importanciaq, y no les apoyan con conocimientos y experiencias adicionales para resolver los problemas asociados con el crecimiento urbano acelerado.
Las oportunidades existentes para un desarrollo urbano positivo no se están aprovechando, ya que quienes saben lo que se puede hacer y cómo podría hacerse, carecen generalmente de la oportunidad de plantear sus propuestas. Esto cnduce a la puesta en marchas de programas centralizados inefectivos, ineficaces e inadecuados. La centralización del poder implica la pérdida de importantes recursos humanos, un descenso de la participación ciudadana activa y la utilización ineficaz de la ayuda al desarrollo.
2.- Falta de sentido comunitario.
A medida que se desarrollan los países, la población tiende a emigrar de las zonas rurales a las urbanas en busca de oportunidades en el mercado laboral. Para quienes fueron educados en sociedades pequeñas, orientadas hacia la comunidad, el traslado a las ciudades con su ritmo frenético de vida constituye a menudo una experiencia traumática. Los sentimientos de aislamiento de los nuevos pobladores de las ciudades conducen a mayores tasas de criminalidad, desempleo y un sentimiento de desapego.
Fuente.-( Guia de Acción Joven sobre Desarrollo Sostenible).
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